La industria de la carga aérea ofrece una conectividad y velocidad claves para el movimiento de bienes. C.H. Robinson explora el estado actual y las perspectivas del transporte aéreo de bienes, y entrega la visión de Juan Carlos Serna, director aéreo para América Latina de C.H. Robinson, en la mejora de las capacidades para clientes globales.
Tras un año de ajustes luego de la pandemia, en 2023, el sector de la carga aérea muestra signos positivos de recuperación a principios de 2024. Los datos de mercado de fuentes como IATA y Xeneta indican un crecimiento medio del 12% en la demanda de servicios de carga aérea en el primer trimestre de 2024. Este crecimiento está impulsado por múltiples factores, especialmente, por las disrupciones en el transporte marítimo en el Mar Rojo y el Canal de Panamá; y un aumento en los volúmenes de e-commerce, particularmente entre Asia y Europa, y Asia y Norteamérica.
Las plataformas de e-commerce están liderando este cambio. Las mismas, que antes dependían de integradores o servicios de mensajería como FedEx y UPS, ahora están contratando espacio premium con aerolíneas en rutas comerciales y utilizando vuelos chárter dedicados. Este cambio estratégico ha permitido a estas plataformas optimizar sus operaciones y ofrecer un servicio más rápido y eficiente a sus clientes.
El transporte de carga aérea ocupa una posición estratégica en el mercado logístico, principalmente debido a tres consideraciones principales:
- Valor de los bienes: Aproximadamente el 35% de los bienes globales por valor se transportan por vía aérea.
- Naturaleza de los productos: Los productos perecederos, que requieren tiempos de tránsito rápidos para mantener la frescura, se benefician significativamente del transporte aéreo.
- Requisitos de tiempo de tránsito: La necesidad de una entrega rápida, ya sea para los programas de producción, la disponibilidad minorista o las expectativas de los consumidores, a menudo justifica el costo superior del transporte aéreo sobre las opciones marítimas o multimodales.
“En C.H. Robinson, los servicios de carga aérea son una parte vital de nuestra oferta de soluciones logísticas, diseñadas para respaldar y optimizar las cadenas de suministro de nuestros clientes. Nuestra red global de oficinas y profesionales de logística garantiza la ejecución perfecta de las operaciones de carga aérea para cumplir con las expectativas de los clientes”, mencionó Serna.
Desde C.H. Robinson destacan la importancia de trabajar en estrecha colaboración con los agentes de carga para implementar procedimientos estándar, canales de comunicación, expectativas de servicio e indicadores clave de desempeño. Este enfoque colaborativo garantiza la transparencia y la rendición de cuentas, lo que permite adaptarse y mejorar según sea necesario para lograr los resultados deseados.
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“Nuestra infraestructura tecnológica, incluida la plataforma Navisphere, proporciona a los clientes visibilidad, informes e información esenciales para gestionar su logística de manera efectiva. Navisphere ofrece capacidades de seguimiento en tiempo real, gestión de costos y pronóstico, mejorando la eficiencia operativa y la toma de decisiones”, destaca Serna.
El panorama regulatorio y aduanero es un aspecto crítico del transporte aéreo. Es importante contar con un proveedor con presencia local, que conozca las particularidades de cada mercado, y al mismo tiempo con presencia global, lo que le permite llegar a los mercados deseados con fluidez en aspectos regulatorios. Los equipos operativos de C.H. Robinson cuentan con el apoyo de expertos en cumplimiento comercial, aduanas y marco regulatorio, lo que garantiza que todos los envíos, incluidas las cargas peligrosas como las baterías de iones de litio, cumplan con las últimas regulaciones y estándares de seguridad.
C.H. Robinson resalta el uso de su plataforma en línea Navisphere, la cual desempeña un papel crucial en la gestión de envíos, la generación de informes y la visibilidad de la carga en tiempo real. Esta capacidad ayuda a los clientes a controlar los costos y anticiparse a las futuras necesidades.
Además, la nueva incorporación de Navisphere incluye informes de sostenibilidad y emisiones, ofreciendo a los clientes información sobre el impacto ambiental de sus operaciones y oportunidades de mejora. Este enfoque holístico no solo mejora la eficiencia operativa, sino que también respalda los objetivos de sostenibilidad de los clientes.
El transporte aéreo tiene un impacto inevitable en las emisiones de carbono. Sin embargo, la industria y C.H. Robinson están desarrollando activamente iniciativas para mitigar este impacto. “Creemos que una cadena de suministro más eficiente es más sostenible. Por lo tanto, un enfoque colectivo colabora con socios estratégicos, aerolíneas e instituciones para crear programas de sostenibilidad. Estos incluyen programas de compensación de CO2, iniciativas de biocombustibles y otros proyectos de responsabilidad social enfocados en neutralizar las emisiones”, mencionó Serna.
C.H. Robinson tiene un interés estratégico en el segmento de productos florales y perecederos, aprovechando la experiencia de Robinson Fresh, una división de C.H. Robinson, particularmente en el mercado norteamericano. “Nuestra combinación de soluciones puerta a puerta, redes de temperatura controlada y altos estándares en el manejo de productos proporciona un valor incomparable a los clientes”, dijo Serna.
Finalmente, la compañía cuenta con un almacén refrigerado en el Aeropuerto Internacional de Miami, que permite conectar la red de transporte de Estados Unidos con el resto del mundo. Esta infraestructura ahorra tiempo y dinero, asegurando que los productos de los transportistas lleguen a sus destinos en óptimas condiciones.
La industria de la carga aérea se encuentra en un punto de inflexión, con desafíos y oportunidades únicos. Las innovaciones tecnológicas, la colaboración estratégica y un enfoque en la sostenibilidad están transformando la manera en que se manejan las cadenas de suministro globales. C.H. Robinson, con su red global y experiencia en el sector, está bien posicionada para liderar estos cambios y ofrecer soluciones que no solo mejoren la eficiencia operativa, sino que también contribuyan a un futuro más sostenible para el transporte de carga aérea.
El futuro del transporte aéreo de carga se vislumbra prometedor, con un enfoque en la mejora continua y la adaptación a las necesidades cambiantes del mercado. Las empresas que puedan innovar y colaborar efectivamente serán las que lideren este camino hacia una logística global más eficiente y sostenible.
Fuente: Mundo Marítimo
