El sector de la carga aérea ha experimentado un impulso significativo en los últimos meses, reflejando un crecimiento del 6,7% a nivel global entre el primer y segundo trimestre de 2024. Este repunte se debe en parte a la creciente demanda y a la mayor capacidad en rutas claves como América del Norte y Asia, impulsado por la recuperación económica y la disrupción en rutas marítimas tradicionales debido a conflictos geopolíticos.
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Sin embargo, este panorama positivo se ve ensombrecido por una alta volatilidad e incertidumbre en el entorno económico global. Mientras que América del Norte y Asia han liderado el crecimiento, Europa ha mostrado un preocupante estancamiento. Además, los precios de los servicios de carga aérea han aumentado considerablemente, con un incremento del 5,3% en los trayectos de ida y del 13,5% en los de regreso. Estas alzas se deben en gran medida a restricciones de capacidad, como la prohibición de sobrevolar el espacio aéreo ruso y las limitaciones en los vuelos de pasajeros entre China y Estados Unidos, que han reducido el espacio disponible para el transporte de mercancías.
A pesar de las señales positivas, las perspectivas para el sector están sujetas a la evolución de diversas variables económicas y políticas. La recuperación económica global, los conflictos geopolíticos y las decisiones regulatorias de los gobiernos serán determinantes en el desempeño de la carga aérea en el corto plazo. En este entorno, la industria debe mantenerse alerta y adaptable ante las posibles fluctuaciones que puedan surgir en el mercado.
El repunte del sector es indiscutible, pero la pregunta que queda es: ¿podrá la carga aérea mantener este impulso en medio de la incertidumbre global? La respuesta dependerá de cómo evolucione el complejo y cambiante panorama internacional.
Fuente: America Retail