Un Problema Evidente en las Carreteras Chilenas
El presidente de la Asociación de Transportistas de Punta Arenas, Carlos Estrada, ha levantado una voz de alerta que resuena con preocupación en el ámbito del transporte de carga. En una denuncia reciente, Estrada acusó que los camiones provenientes de Argentina ingresan a Chile con un sobrepeso que, aunque evidente, parece ser ignorado por las autoridades encargadas de su fiscalización. Esta situación no solo compromete la seguridad vial, sino que también subraya una aparente negligencia en la aplicación de las normativas vigentes.
Una Carga Pesada de Incongruencias
“Hoy muchos transportistas argentinos entran y salen de nuestro país con exceso de peso. En Chile solo permitimos 45 toneladas y en Argentina un camión similar llega a las 52,5 toneladas”, afirmó Estrada, destacando una discrepancia notable que pone en riesgo las vías chilenas. Según el dirigente, esta problemática se evidencia claramente en los manifiestos de carga, documentos que son revisados por las autoridades nacionales al ingreso de estos vehículos al país.
El sobrepeso declarado en estos documentos supera los límites permitidos en Chile, lo cual debería ser motivo suficiente para impedir su entrada. Sin embargo, Estrada denuncia que esta flagrante violación se produce ante la vista gorda de las autoridades responsables de la fiscalización. “Lo que denunciamos queda en evidencia en los manifiestos internacionales de carga, que forman parte del trámite aduanero que hacen al entrar al país. Se declaran cargas sobre las 30 toneladas que son transportadas en camiones que pesan más de 15 toneladas, si sumamos, se exceden las 45 toneladas que Chile permite”.
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Una Fiscalización Deficiente
La solución a este problema, según Estrada, sería sencilla si las autoridades aduaneras cumplieran con su deber. “Si los funcionarios públicos que revisan el orden de los documentos que entran al país cumplieran con el artículo 175 del Código Penal, que obliga a denunciar los delitos de los que sean testigos, esta irregularidad llegaría a su fin. Ya que el artículo 62 de la Ley de Tránsito dice que no podrán circular los vehículos que excedan los pesos máximos permitidos, luego éstos deben ser impedidos de entrar a nuestro país”, expresó el dirigente gremial.
La negligencia en la fiscalización no solo pone en peligro la infraestructura vial chilena, sino que también plantea serios riesgos de seguridad. Estrada plantea una pregunta que debería resonar en las altas esferas gubernamentales: “¿Quién se hace responsable si un camión argentino que cruzó por un paso habilitado con 50 toneladas protagoniza un accidente fatal o se hunde la barcaza en que transita?”. Esta interrogante no es meramente retórica, sino una llamada de atención sobre las posibles consecuencias trágicas de la inacción.
Un Diálogo Binacional Necesario
En un intento por abordar esta y otras problemáticas relacionadas con el transporte de carga entre Chile y Argentina, se inicia hoy en Buenos Aires una reunión técnica binacional. Este encuentro representa una oportunidad crucial para plantear temas críticos como el sobrepeso de los camiones y la regulación del largo de los rodados, que actualmente operan al margen de la normativa en ambos países.
La reunión promete ser un espacio de diálogo y negociación, donde las autoridades chilenas y argentinas deben buscar soluciones efectivas y coordinadas. Es imperativo que se establezcan mecanismos de control más estrictos y que se garantice el cumplimiento de las normativas vigentes, no solo para proteger las infraestructuras viales, sino también para salvaguardar la vida de quienes transitan por estas rutas.
Un Llamado a la Acción
La denuncia de Carlos Estrada no debe ser ignorada. Es un llamado urgente a las autoridades para que actúen con diligencia y responsabilidad. La seguridad vial y la integridad de las infraestructuras chilenas no pueden seguir siendo comprometidas por la negligencia en la fiscalización del transporte de carga.
Es fundamental que se fortalezcan los controles aduaneros y se asegure que todos los camiones que ingresan al país cumplan con las normativas de peso establecidas. Asimismo, es vital que se implementen sanciones efectivas para quienes violen estas normativas, y que se tomen medidas preventivas para evitar que situaciones similares se repitan en el futuro.
La problemática del sobrepeso de los camiones argentinos es solo una de las muchas que enfrentan los transportistas chilenos. Sin embargo, su impacto es significativo y pone en riesgo tanto la seguridad vial como la infraestructura del país. Es momento de que las autoridades tomen cartas en el asunto y trabajen en conjunto con sus contrapartes argentinas para asegurar que el transporte de carga se realice de manera segura y conforme a las normativas establecidas.
El futuro del transporte de carga entre Chile y Argentina depende de la voluntad política y de la capacidad de ambos países para implementar y hacer cumplir regulaciones que protejan a todos los usuarios de las vías. Las palabras de Carlos Estrada deben ser una llamada a la acción para todos los involucrados en este sector. La seguridad y la eficiencia del transporte de carga son esenciales para el desarrollo económico de ambos países y deben ser priorizadas de inmediato.
Fuente: El Pingüino
