El costo del transporte marítimo internacional ha experimentado un aumento significativo, mientras las empresas se apresuran a enviar mercancías para la temporada festiva mucho antes de lo habitual. Este fenómeno es una clara señal de los efectos prolongados de los trastornos causados por los ataques en el Mar Rojo.
Según el Financial Times, el costo medio de enviar un contenedor de 40 pies entre el Lejano Oriente y el norte de Europa ha alcanzado los 4.343 dólares, aproximadamente tres veces más que en el mismo periodo del año pasado, según el analista de mercado Xeneta. Aunque estos precios aún no superan los picos observados después de que los militantes hutíes de Yemen comenzaran sus ataques en noviembre, se están recuperando en un periodo que normalmente es tranquilo para el transporte marítimo.
Michael Aldwell, jefe de logística marítima de Kuehne + Nagel, señaló que “la temporada alta se ha adelantado”. Los minoristas que usualmente comienzan a importar productos para las rebajas del Viernes Negro y la temporada navideña entre finales de verano y otoño, ahora están adelantando estos envíos debido a la incertidumbre generada por los ataques hutíes.
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El resurgimiento de los costos de envío se atribuye principalmente a los ataques en el Mar Rojo, los cuales han obligado a los armadores a tomar rutas más largas alrededor de África, limitando la oferta mundial de espacio para envíos y contenedores. Además, la guerra en Gaza ha exacerbado esta situación, ya que los armadores se preparan para posibles interrupciones en las cadenas de suministro globales durante los meses cruciales de otoño.
Aldwell también mencionó que algunos clientes de Kuehne + Nagel habían reservado anticipadamente envíos para el periodo festivo ya en abril, mientras que otros estaban almacenando productos de verano como muebles de exterior y barbacoas. La demanda ha aumentado, impulsada por clientes que redujeron previamente sus inventarios en previsión de una débil demanda de los consumidores este año.
Peter Sand, analista jefe de Xeneta, destacó que los importadores han aprendido de la pandemia que la mejor manera de generar resiliencia en sus cadenas de suministro es “abastecerse lo más rápido posible”. Algunas empresas han decidido traer productos navideños ahora, anticipando una posible escasez de capacidad en la temporada alta tradicional.
Marco Forgione, director general del Instituto de Exportación y Comercio Internacional, explicó que las perspectivas financieras de las principales líneas navieras parecían débiles antes de los ataques en el Mar Rojo. Sin embargo, ahora se espera que la interrupción continúe más adelante este año, lo que alterará las cadenas de suministro a largo plazo.
Incluso después de que se resuelva la perturbación en el Mar Rojo, las cadenas de suministro se verán afectadas por la inestabilidad geopolítica recurrente. Forgione concluyó que “vamos a ver la gestión de inventarios mucho más a la vanguardia”, subrayando la necesidad de adaptarse a un entorno global cada vez más incierto.
La situación actual subraya la importancia de la preparación y la adaptabilidad en el transporte marítimo, destacando cómo los eventos geopolíticos pueden tener un impacto profundo y duradero en la logística global.
Fuente: Portal Portuario
